Adiós a los trenes.
La Exposición Universal de 1992 incluyó una fuerte remodelación del ferrocarril en relación con su paso y estacionaje en la ciudad.
El proyecto y realización de la nueva estación de Santa Justa dejó sin contenido la funcionalidad de las clásicas de San Bernardo y de Plaza de Armas.
Ambas fueron despojadas de sus vías férreas y conservadas sus estructuras para darles otra función.
La fotografia recoge los últimos días, en noviembre de 1990, del desmontaje de todo efecto ferroviario de la histórica estación de Córdoba.